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Ansiedad Crónica: Qué es, tipos y como tratarla

ansiedad crónica

El estilo de vida actual es sumamente estresante y muchas personas se sienten angustiadas. De esa manera se cimientan las condiciones para que se desencadene la ansiedad. 

Que una persona se sienta ansiosa en determinados momentos es normal. Pero si se extiende esta circunstancia hay que prestarle atención. Y es que puede tratarse de un trastorno mental crónico.  

Si es el caso y no se controla puede suceder que quienes lo padecen vaticinen todo como un desastre. Incluso, las situaciones menos complejas o irreales provocan miedo o angustia.

Una de cada 14 personas experimenta la ansiedad y muchas la sufren en niveles extremadamente elevados. Esto es lo que se conoce como ansiedad crónica, un trastorno mental que puede hacer que una persona viva en una constante zozobra debido a que no controla el miedo. ¡Veamos!

Lo que encontrarás en este articulo

¿Qué es la ansiedad crónica?

Que es la ansiedad crónica

Es un trastorno mental persistente que la persona no puede controlar y que tiende a ocasionar miedo o terror a niveles extremos. La ansiedad se vuelve crónica si persiste por más de seis meses y el paciente se habitúa a vivir con intensa angustia. 

Durante meses y hasta años la persona ansiosa siente incertidumbre constante porque imagina situaciones futuras que le pueden dejar consecuencias desagradables.  

La también denominada ansiedad de alta intensidad, entre otras cosas, impide a quien la padece el cumplir con hábitos como salir de casa, trabajar, dormir o ejercitarse. Esto es así porque cualquier circunstancia adversa se sobredimensiona. No obstante, al paciente no se le hace fácil evitar reaccionar de esa forma. 

La ansiedad pasa a ser crónica cuando no se trata al comienzo porque el individuo la evade. Esto desencadenan situaciones aún más graves y así es más difícil que la persona pueda lidiar con lo que percibe de su entorno. 

El individuo ansioso en un grado crónico siente que no puede controlar el miedo que la causa imaginarse posibles escenarios. 

Los factores que originan este trastorno mental son variopintos. Pueden estar asociados con problemas de autoestima. También con un acontecimiento traumático, tendencia a sentir estrés, generar pensamientos negativos y hasta factores genéticos.

Sintomas

No hay una forma específica en la que la ansiedad en un nivel crónico se somatice. Todo dependerá de las circunstancias, de la realidad de cada paciente. Veamos algunos de los síntomas más comunes:

  • Dificultad para concentrarse
  • Agotamiento
  • Preocupación extrema
  • Miedo
  • Escalofríos
  • Anticipación negativa de las situaciones
  • Sensación de culpa
  • Presión en el pecho
  • Taquicardias
  • Imposibilidad de solucionar problemas
  • Aparición de fobias
  • Hormigueo y dolores en el cuerpo 
  • Aturdimiento
  • Dificultad para tragar 
  • Sensación de nudo en la garganta
  • Sofocos
  • Sudoración
  • Desesperación
  • Deseos de gritar y correr
  • Sensación de desfallecimiento

 

La mayoría de las personas que sufre este tipo de ansiedad trata de disimular su condición. Pero si sospechamos que nosotros o un conocido la padece, ser suspicaces ante la aparición de estos síntomas es trascendental para empezar a hallar soluciones.

Tratamiento

Hoy la psicología y la medicina ofrecen soluciones efectivas para tratar esta condición. El primer paso es aceptar que padecemos este trastorno mental.

Es importante saber que la ansiedad de alta intensidad no va a desaparecer, pero sí se puede manejar o canalizar con tratamiento. La psicoterapia es uno de los más efectivos para conseguirlo.

Con una terapia cognitiva-conductual o una de aceptación y compromiso, el paciente puede aprender a cómo desarrollar más pensamientos racionales. Así reflexionará sobre sus circunstancias con el propósito de controlar lo que le genere miedo y angustia al extremo. 

En tescuchamos.com nos preocupamos por tu buena salud mental y te ofrecemos excelentes especialistas. Ellos pueden ayudarte a diagnosticar y a tratar este tipo de trastornos mentales con las mejores técnicas y estrategias. 

Hay diversas y apropiadas técnicas terapéuticas. Entre ellas está una que fue creada en 1929:  la técnica de relajación progresiva Jakobson. Esta consiste en tensar y relajar los músculos para controlar la sensación crónica de ansiedad.  

Otras formas con las que se puede combinar una psicoterapia es con el ejercicio físico y con psicofármacos. Pero estos últimos tienen que ser prescritos por un médico psiquiatra.

Depresión y ansiedad crónica

Ambas patologías son trastornos mentales distintos y afines a la vez. La primera condición puede ser una señal de que una persona sufre de depresión. También suele ocurrir lo contrario. 

Los cuadros de ansiedad crónica y los de depresión son respuestas ante diversas situaciones, generalmente adversas. 

Una persona ansiosa tiende a sentirse en peligro constante antes acontecimientos futuros. Un asalto o un intento de violación son dos muestras de esos eventos. Mientras que la depresiva siente tristeza y no halla motivaciones ni siquiera para comer. 

Hay síntomas de la ansiedad de alta intensidad que están relacionados con la depresión. La preocupación y la agitación constantes, por ejemplo. También la irritabilidad y el sentimiento de culpa. 

El paciente depresivo y el que padece un trastorno de ansiedad crónica tienen una débil o falsa percepción de sí mismos. Y más aún si se padecen los dos trastornos mentales.

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